El controvertido protocolo del CDC denominado Título 42 podría estar llegando a su fin. ¿Cuándo podemos esperar que se levante oficialmente la política?
Aunque el Gobierno declaró anteriormente que la controvertida política del Título 42 se mantuvo por razones sanitarias y que el CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) era el único organismo gubernamental con potestad para suprimir esta medida, ha trascendido recientemente que podría no ser necesariamente así. Varios medios de comunicación informaron hace unos días de que la Casa Blanca parece estar planeando el fin del protocolo sanitario en mayo.
La política denominada Título 42 se aplicó al principio de la pandemia de COVID-19, y sigue activa dos años después, a pesar de que la mayoría de las restricciones se han levantado en el país y la gran mayoría de la población ya está vacunada contra el virus. Muchos defensores de la inmigración presionaron antes al gobierno para que detuviera esta medida, pero fue en vano.
Aunque todavía no hay anuncio oficial, muchos medios de comunicación anunciaron que la Casa Blanca fijará el 23 de mayo como fecha final para la aplicación de la medida. El propio Presidente Biden hizo saber a la prensa que pronto habrá noticias sobre este asunto cuando se le preguntó por el tema.
Una política problemática: los efectos del Título 42 sobre la inmigración
La aplicación continuada del Título 42 ha sido cuestionada no sólo por activistas de derechos humanos, sino también por congresistas republicanos como Schumer y Menéndez. Hasta ahora, el Gobierno afirmaba que la decisión de prorrogar esta medida correspondía exclusivamente a los CDC, que evalúan la necesidad de dicho protocolo cada 60 días. Sin embargo, parece haber ahora un consenso común entre muchos demócratas de que el CDC cambiará su postura si hay una directiva presidencial para hacerlo.
Para muchos, el mantenimiento de esta medida no parece tener ninguna razón lógica desde el punto de vista epidemiológico o sanitario, y su continuidad revela una agenda oculta contra la inmigración. El desagradable paralelismo con su aplicación durante la administración abiertamente antiinmigrante de Trump ha sido planteado por muchos defensores que temen que la agenda migratoria del demócrata no sea lo suficientemente sincera.
La Patrulla Fronteriza también ha informado de que el número de solicitantes de asilo que llegan a la frontera cada día es muy elevado, y podría batir nuevos récords, y que las actuales restricciones sanitarias son lo único que mantiene esta cifra relativamente baja.
¿Por qué esperar hasta el 23 de mayo?
Algunas fuentes especulan con que la fecha facilitada por el Gobierno -el 23 de mayo- pretende
dar a las autoridades fronterizas tiempo suficiente para establecer una estrategia de acogida de los solicitantes de asilo una vez que se levanten estas restricciones.
Mientras que el número de migrantes que viajan hacia la frontera parece estar aumentando, no puede decirse lo mismo de los casos de COVID-19 en la frontera, y es precisamente ahí donde debería centrarse la cuestión del Título 42: la medida sanitaria está ahí para proteger la salud de las personas, y no para ser utilizada como excusa para expulsar a los migrantes y acelerar las deportaciones.
En cualquier caso, está previsto que el CDC revise sus protocolos sanitarios en algún momento de abril, por lo que probablemente pronto habrá noticias oficiales sobre este tema. Creemos que se trata de una medida injusta que ha sido utilizada indebidamente tanto por las administraciones actuales como por las anteriores para saltarse leyes y reglamentos y denegar ayuda humanitaria a los solicitantes de asilo en la frontera sur. Esperemos que se levante pronto.
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